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Uht/Ah/Peñi/Lamngen (Porque acá y allá)

"Amulepe taiñ weichan" 
(Külapang)
"(...) cantando nuestras canciones/ invadiendo las calles/ con nuestra ira (...)" 
(Tawfiq Zayad) 

Qué hace un hombre cuando la inocencia lo mira con los ojos vacíos. Qué puede responderle a un niño que le exige muerte. Cómo explicar los años, cuando el oído y el alma son testigos; cómo los siglos, cuando los repitieron sin vergüenza alguna. Siempre es tarea de otro, pero nosotros, los hijos de nadie, sobrellevamos el miedo que no los dejaron tragar. Lo volcamos en la fiesta de la calle su miedo, nos tomamos lo que les negaron, el carnaval. Y no se sorprendan si desta fiesta nace el fuego del lof, del fénix, la ira y se queman sus bancos (de causalidad) y se queman sus multitiendas y forestales (de causalidad) y se quema su tradición de invasión (de causalidad)  y se queman las calles poco a poco rodeando sus muros bastardamente preciosos. Porque el fuego que sembraron los suyos es el fuego que cosechamos hoy, la semilla envenenada, los olivos ardiendo por dentro, la cara irritada de sonrisas a crédito, la mesa y el café esperando a quienes no vuelven, siempre y cuando dejen agua.
Siempre canta quien le duele y la rabia es la explosión dese puñal. Nombres sobran para justificar. Cuando la guitarra se desgarra ¿vas a pedirle discreción? No pidan respeto hoy, cuando no saber es la mejor excusa. Basta de silencio, cuando no se han detenido ni en el primer acorde deste acordeón sangrante. Suena suena suena solo escucha.


Dime en qué círculo te encuentro.

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